En su afán por retornar a la máxima categoría, el Preconte Telde tenía esta jornada un match ball frente al Unami de Segovia. El partido comenzó de cara y a escasos cuatro minutos parecía que se iba al traste. El pitido final dejó los tres puntos en Gran Canaria y con un nombre propio: Nira. La jugadora nacida en Teror anotó los cinco tantos de su equipo y le permite seguir con opciones de ascenso.
Pese a no ser pareja, Nira y el gol mantienen una bonita relación de amistad. No es una especialista en esa faceta, pero sus ganas y lucha le llevan a estar siempre en el lugar que le corresponde para empujarla. En la presente campaña lleva anotados un total de 21 goles y es la pichichi de su equipo “Yo no me considero una goleadora, lo que pasa es que tengo más oportunidades ya que juego en posiciones adelantadas. Muchas veces si no hay pase no hay gol y yo busco que mis compañeras me vean desmarcadas para contribuir con mis goles” comentaba Nira, que además añadía “De los cinco goles de esta jornada tres fueron de pase de Cris. Si ella hubiera definido, que también pudo hacerlo, yo no hubiera marcado. Así ha sido a lo largo de la liga”
Natural de Teror, Nira comenzó jugando en un callejón de la villa mariana. “Recuerdo que jugaba con los primos de Laura Ponce, que ya estaba jugando en la elite, en la calle y se fijaron en mi” comentaba Nira con respecto a sus inicios cuando era la más chica y la única niña “Con doce años comencé a entrenar en el Aterura pero no podía fichar por la edad. Fueron dos años sin jugar pero entrenando con muchas ganas”
El desparpajo y la fuerza que tenía esa jugadora que apenas levantaba un palmo del suelo no
pasaron desapercibidas para el Preconte Telde. Un año más tarde, Vicente Herrera, técnico teldense, la llevó al primer equipo aunque no jugó “Yo estaba muy ilusionada por estar en aquel equipazo. Pero también tenía muchas ganas de jugar y no lo hice. Vicente me aconsejó que volviera a las categorías territoriales para tener minutos y formarme mejor”.
El Aguas de Teror y el Liverpool fueron sus siguientes destinos. Terminó con su formación al tiempo que luchaba por mucho más que unos minutos. La copa en el Aguas de Teror y la fase de ascenso a primera división con el conjunto de Arucas fueron sus metas deportivas. Curiosamente fueron eliminadas del ascenso en Córdoba por el equipo de su compañera Cris Gimeno.
La selección Canaria de Fútbol Sala fue empujón definitivo con tres convocatorias. Con la Federación Interinsular de Las Palmas alcanzó su mayor logro al quedar cuartas en Sanlúcar de Barrameda.
Su llegada al Preconte Telde fue el paso natural. Jorge Garrido era el técnico que llevaba las riendas del primer equipo y la hizo debutar con 17 años. Han pasado nueve años y es una de las fijas en todas las alineaciones desde entonces y sea cual sea el técnico que ha estado al frente.
Eduardo Moreira, Vicente Herrera, Tino Castro, Jorge Garrido, Santoyo, Pepe Arencibia, Silvio Rocha, Mingo Valencia, Placido Sacharandani y Eloy Martin han sido los entrenadores de su carrera. No se decanta por ninguno ya que “de todos he aprendido algo” Nira añadía para finalizar “En el Fútbol Sala he vivido de todo. He conocido a mucha gente y he luchado por muchos objetivos. Yo estoy porque me gusta jugar y disfrutó haciéndolo. Afortunadamente y después de algunos años en los que esta modalidad en féminas iba cuesta abajo, ahora todo pinta mucho mejor. Han salido muchas niñas nuevas que vienen con ganas y que tienen mucha clase” y finalizaba con un deseo “Todos debemos aportar nuestro granito de arena para que esto siga adelante. En este sentido, sería ideal volver a ver una selección canaria. En mi época eran sénior y ahora son sub-21. Hace unos años no habían chiquillas, pero ya si las hay y seguro son competitivas”.
Articulo recogido en La Provincia (26 de febrero de 2014)
